Una marcha que no da contramarcha

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Son 13 días de resistencia y lucha en la capital los que están llevando los pequeños productores, cañeros,  acompañado de los cooperativistas que día a día van recibiendo más y más adhesiones no solamente de los sectores organizados, sino de los sectores populares y la ciudadanía, en el interior del país en algunos departamentos también ya empiezan a movilizarse.

Es decir hay un descontento generalizado y la masa comienza a visibilizar  ese descontento hacía el Gobierno de Horacio Cartes, va creciendo y podría llegar a convertirse en una gran bola de nieves con amenazas de llevar todo a su paso. Es que la crisis no solamente golpea al campo, en la ciudad es desesperante la situación de la clase trabajadora, que ve como todos los días le meten la mano en el bolsillo,  mientras el Gobierno dice no hay dinero para atender los reclamos sociales.

Sin embargo hay «cocido de oro», «agua mineral de oro», «secretarias vips»; «niñera de oro»; «caseros de oro»; asesora viajera», interminable la lista si vamos a seguir nombrando. «El cambalache» sin fin de esta orgía de despilfarro del erario público se generan en instituciones del Estado que menejan los recursos del pueblo, y donde están políticos, funcionarios y funcionarias corruptos y corruptas.

El Gobierno de Horacio Cartes si tiene recursos para subsidiar a empresarios del sector transporte con 30 mil Dólares por unidad para renovación de la flota, y al mismo tiempo «saquear» a  la ciudadanía con el aumento del pasaje en esas unidades «diferenciados» con aire acondicionados, supuestamente con el servicio la gente iban a viajar más cómodo, pero se ha visto que el servicio es pésimo, se viajan hacinados, incómodos, y con calor. Eso se configura como una gran estafa a la sufrida ciudadanía.

300 millones de Dólares anuales dejó de recibir el país por cobro de impuestos a los sojeros, Horacio Cartes vetó esa Ley, dando la razón al descontento de labriegos, cooperativistas y la ciudadanía, quienes argumentan que el Gobierno de Cartes privilegia a los sectores de siempre,  sojeros, ganaderos, empresarios, industriales y corporaciones multinacionales, al mismo tiempo de castigar a sectores más vulnerables, a los pobres con impuestos.

Al hacer una suma de estos recursos dilapidados por el esquema de corrupción y cobrando impuestos a los sojeros, tenemos suficiente dinero para honrar el pedido justo de los pequeños productores y cooperativistas, quienes reclaman: Condonación de las deudas publicas y privadas de los pequeños productores (subsidian a transportistas), fortalecimiento a la agricultura familiar campesina (hoy ya no tienen nada que producir por falta de recursos y el avance de la producción mecanizada, sojeros). Los cooperativistas reclaman, la derogación de la Ley 5501/15 del 10% de IVA al acto cooperativo (cobrar impuestos a los sojeros y no cargar a los pobres).

Juan Carlos Baruja ministro de Agricultura y Ganadería señaló que que la condonación de deudas solicitada por los campesinos es de «cumplimiento imposible», y hoy el Gobierno llamó a un dialogo con los labriegos después de una postura intransigente, la presión de  la movilización hace que «negocie» con los protagonistas y ofrecen re-financiamiento de las deudas, no ofrecen otra alternativa, cosa difícilmente aceptada por los pequeños productores, porque no tienen piden la condonación y no pueden dar lo que no tienen.

Mientras en la Cámara de la vergüenza, (Diputados), la «aplanadora colorada» servil a Horacio Cartes, se aprestan a rechazar cualquier intento de derogación de la Ley del acto cooperativo que entró en vigencia desde el 1 de abril pasado. Así se presenta el panorama, el Gobierno no da a torcer, mañana jueves se verá la «muñeca» de los políticos en la sesión del Senado y Diputados cuando traten estos temas, mientras tanto afuera en la Plaza de Armas estarán presionando más de 20 mil entre cooperativistas y labriegos, atentos a los que decidan la clase política. «No abandonaremos la plaza, hasta conseguir nuestro reclamo, esto es una carrera de resistencia» han dicho.