Ciudadanía apoya gestión de Indert en la Recuperación de Tierras para la Reforma Agraria

60 organizaciones de distintos sectores se reunieron con el titular del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert), Ing. Marciano Barreto, oportunidad en la cual se abordó el replanteo de mensura en el que está embarcada dicha institución en la zona este del país. Las organizaciones afirmaron que apoyan la gestión institucional del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra- INDERT para transparentar la situación de la tenencia de la tierra y los beneficiarios de la reforma agraria. Teniendo como antecedente los recientes conflictos suscitados en distintas zonas rurales de nuestro país, como los casos del Asentamiento San Juan en el dpto. de Canindeyú, Antebi cué en los departamentos de Concepción y Amambay, Ñacunday en el Departamento de Alto Paraná, entre otros, en donde se están recuperando tierras que pertenecen al Estado paraguayo.

La reunión, se realizó en la sala de reuniones del INDERT, contó con la presencia de representantes de la Cooperativa de Productores de Sésamo (Cooprose), de la Mesa Agraria Nacional. Igualmente, asistieron representantes de las organizaciones civiles Base Is, CEPAG, Alter Vida, Sobrevivencia, Red de Organizaciones Ambientalistas del Paraguay (ROAM), Pojoaju, Voces Paraguay y Coordinadora Cordillera, así como otras entidades de la sociedad civil e instituciones totalizando unas 60 organizaciones ciudadanas.

En la oportunidad, la escribana Stella Maris de Rodríguez reseñó la situación jurídica de las 257 mil hectáreas que abarcan distritos de Alto Paraná, Itapúa, Caaguazú y Caazapá, que, según una extensa investigación realizada, pertenecen al Estado Paraguayo, según sentencia definitiva de la Corte Suprema de Justicia emitida en 1963.

El replanteo de la mensura judicial que se inicia el 28 de este mes tiene como objetivo, según se informó, transparentar el caso y deslindar las tierras que son de propiedad del Estado paraguayo.

Felicitaron a la administración del Indert por su postura comprometida

Todas las entidades al final de la reunión señalaron que se comprometen a apoyar este proceso y que felicitan a las autoridades del Indert por la entereza con que está trabajando a favor de la Reforma Agraria y de la patria misma.

Así también hacen un llamado a todos los sectores involucrados para buscar de manera conjunta una solución definitiva a la inequidad en la distribución de tierras, que es una violación a un derecho humano fundamental.

Los conflictos en el campo con sus consecuencias fatales son problemas políticos y sociales qué nuestro país viene acarreando durante décadas, en donde se han repartido tierras a aquellos que no eran beneficiarios de la reforma agraria, conocidas como tierras malhabidas o mal adjudicadas y en los que se han deforestado más del 90% de la masa boscosa en los últimos 50 años en la Región Oriental para la implementación de ganadería y agricultura empresarial sin asumir los pasivos ambientales y sociales que estas actividades ocasionan, hecho que en los últimos años provocó el desplazamiento forzoso de las comunidades campesinas e indígenas de sus tierras y territorios.

Se constituye una realidad el hecho de que muchos agricultores mecanizados sin ser beneficiarios de la reforma agraria, mediante complicidad de funcionarios inescrupulosos de las administraciones anteriores y el apoyo de sectores políticos más conservadores del Parlamento Nacional, estén ocupando diversas tierras de manera irregular, negándose a devolver estas tierras que son propiedad del Estado.

Las organizaciones campesinas apoyan la gestión institucional del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra- INDERT para transparentar la situación de la tenencia de la tierra y los beneficiarios de la reforma agraria. Instan al Estado a que realice un saneamiento adecuado del sistema catastral de la tenencia de tierras.

Exigieron también al Estado Paraguayo la reparación de los daños y perjuicios causados a los verdaderos sujetos de la Reforma Agraria, en este caso, los mas de 300.000 campesinos/as y comunidades indígenas sin tierras y territorios de nuestro país.

Finalmente hicieron un llamado al diálogo entre todos los sectores para intentar resolver el principal problema que es la estructura inequitativa de la distribución de la tierra en el Paraguay, buscando un modelo de desarrollo rural sustentable, con utilización de energía limpia disponible para la transformación de los productos a fin de darle un valor agregado y mejorar la economía nacional.