MASACRE EN CURUGUATY LA CONSPIRACIÓN MÁS GRANDE DE LA HISTORIA PARAGUAYA

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By Radio TV marzo 18, 2013 18:56

El 15 de marzo, se cumplieron 9 meses de la llamada “masacre de Curuguaty” hasta la fecha no hay justicia ni libertad a los presos políticos, Rubén Villalba y Néstor Castro detenidos y presos en el cárcel de tacumbú cumplen 53 y 50 días de huelga de hambre y con la salud muy deteriorada,  están decididos a llegar hasta el extremo por la libertad, en este mismo caso hay dos mujeres embarazadas que pidieron medidas alternativas a la prisión, y la condena de un joven de 17 años a dos años de prisión dictada por la jueza Yanine Ríos, el proceso judicial de los detenidos está plagada de aberraciones jurídicas y contrariedades donde solo se procesa a campesinos y no a otros sectores como la policía y los usurpadores de la tierra de Campo Moromby la familia Riquelme. Lo acontecido en Curuguaty fue una conspiración de los poderes fácticos para derrocar un gobierno legítimo.

BREVE CONTEXTO

El Paraguay, culminada la Guerra del Chaco del 32 al 35 se encontraba en plena etapa de recuperación tras esa acción bélica la más sangrienta de la era moderna que sufrió. La situación política no era de lo mejor en el país, sobre todo si tomamos que los militares eran los que querían tomar el poder. Y, en ese contexto se sucedían los cuartelazos, las asonadas, los golpes de Estado, y las conspiraciones. Hay que tener en cuenta que a partir del golpe de Estado de 1936 significó fundamentalmente la irrupción de los militares en la vida política nacional. La inestabilidad era tal que cualquier Presidente que tenía las riendas del Estado podía dejar de ser al otro día o en cualquier momento.

Culminada la segunda Guerra mundial, y tras la derrota de los nazis fascistas, Paraguay estaba muy influenciado por el poder nazi fascista. El gobierno del general Higinio Morinigo era de tinte eminentemente nazista y dictatorial, y en esa época de la década del cuarenta tuvimos una sangrienta revolución. Había una hegemonía colorada entonces desde 1947 hasta 1954, todo esto se daba dentro del marco de la Guerra fría, el mundo estaba dividido en socialista y capitalista y se disputaban la hegemonía del poder.

En 1954, Alfredo Stroessner asume la primera magistratura a través de un golpe de Estado, Stroessner un militar con antecedentes pocos claros en la Guerra del Chaco condujo al país con manos de hierros y marcado a sangre de los compatriotas. En la década del 70 estaba en plena vigencia el operativo cóndor patrocinado por los E.E U.U y las desapariciones, exilios forzados, torturas y asesinatos se sucedían en forma ininterrumpida, el solo hecho de pensar diferente ya era merecedor de ser considerado un subversivo, guerrillero, comunista. La dictadura de Stroessner condujo al país en la más negra historia, con una nación devastada, enseñoreada con la corrupción, repartos de tierras a los militares y amigos y la entrega de la soberanía como es la firma espurio del acuerdo de Itaipu con el Brasil.

El golpe de Estado de los “Carlos” puso fin a 54 años  dictadura de Alfredo Stroessner en 1989, y por primera vez el viejo dictador conocía de su propia medicina, el exilio. En el Paraguay se respiraba un aire de libertad donde los compatriotas empezaban a gozar de sus derechos. Sin embargo la turbulencia política continuaba en el aire, y nuevamente la inestabilidad fue el factor denominador, se produjo en el año 1989 lo que se llamó el “marzo paraguayo” una gesta cívica que enfrentó a la locura mesiánica del General Lino Oviedo, en la plaza dejaron sus vidas 8 jóvenes asesinados cobardemente por los oviedistas, a más del asesinato del vicepresidente entonces Dr. Luis María Argaña, también responsabilizado directamente a Lino Oviedo.

El año 2008, marcó un antes y un después en la historia del Paraguay, el pueblo cansado de los atropellos colorados que monopolizan el poder por más de 60 años puso fin a la hegemonía, el gran artífice del cambio Monseñor Fernando Lugo, obispo católico de origen humilde, trabajó en la diócesis de San Pedro una de las regiones más pobre del país a lado de los campesinos sin tierras en momento de mucha conflictividad rural.

Aglutinó a sectores de izquierda, progresista y movimientos sociales y llegó al poder contra todo pronóstico. El gobierno de Lugo se caracterizó por priorizar la política social y ayudar a los sectores históricamente abandonados, los pobres, y la recuperación de la soberanía energética. Por primera vez en el Paraguay se aplicó la gratuidad en la cobertura de salud, algo que parecía una utopía, el proyecto Teko Pora de ayuda monetaria a los pobres y a la tercera edad. Estos puntos es de destacar porque queda demostrado que si uno quiere puede.

Un hecho sin parangón es también la recuperación de la soberanía energética de Itaipu, la triplicación de la compensación por la cesión de nuestra energía al Brasil, de 140 millones de USS, pasó a 360 millones de la misma moneda, ningún gobierno colorado se atrevió a negociar con el coloso de Brasil sobre la compensación económica, se conformaban con migajas que se repartían entre ellos en beneficios personales y para sus campañas electorales, nunca llegaba al pueblo.

Pero los sectores reaccionarios y la oligarquía paraguaya elaboraron un plan maquiavélico desde el mismo inicio que asumió la presidencia, en plena era de paz y sin la influencia ya de los militares se iba preparando el golpe de Estado contra Fernando Lugo el Presidente electo en unas elecciones tal vez la más democrática de Paraguay.

LOS SUCESOS DE CURUGUATY LA CONSPIRACIÓN PERFECTA

El 15 de junio de 2012, luego de muchos intentos los conspiradores por fin encontraron la oportunidad perfecta para consumar la más terrible traición que se puede cometer contra el pueblo paraguayo. Aquella mañana fresca con un cielo limpio y sol brillante se preparaba un desalojo policial de las tierras de Marina Cué, en “Campos Morombi” Curuguaty. En un predio de 2000 hectáreas perteneciente al Estado paraguayo  usurpado  por Blas N Riquelme lacayo estronista y ex Presidente del partido Colorado en la era Stroessner. La finca fue ocupada por campesinos que legítimamente reclaman el derecho a la tierra.

Lo que sucedió después ya es bien conocido, la muerte de 11 campesinos y 6 policías, algunos fueron asesinados sin contemplación por la policía según testigos. Se suscitaron graves violaciones de los Derechos Humanos como ejecuciones arbitrarias en venganza de parte de la policía y un Ministerio Público, corrupto y encubridor. Las investigaciones de la fiscalía adolecen del debido proceso, omitió ayuda humanitaria a los heridos y los que se encontraban en el predio. Una fiscalía sometida a los poderosos terratenientes y un congreso pusilánime que antes de exigir una investigación profundo sobre las matanzas en Campo Morombi, se apuró en preparar el escenario y presentar como culpable al Presidente Fernando Lugo. Tal es así que después de una semana el 22 de junio ya se anticipaba la culpabilidad del Presidente Fernando Lugo en el juicio político exprés  tenía que ser destituido.

Removido de la primera magistratura Fernando Lugo con el campo abierto el sector oligárquico se apoderó del país a la cabeza Federico Franco del partido liberal, seguido de los colorados, unace y Patria querida, hasta la iglesia católica se “agiornó” y se puso a la altura de los vende patrias. El caso de Curuguaty deja más de 50 campesinos procesados, con un fiscal Jalil Rachid y el juez José Benítez funcionales a los poderosos de la mafia de las tierras. El año pasado 8 procesados hicieron huelga de hambre de los cuales 4 llegaron a 60 días en estado crítico a punto de fallecer, consiguieron medidas sustitutivas a la prisión. Hace poco menos de un mes un menor de 17 años fue condenado a 2 años y medio de prisión por la jueza Yanina Ríos, generando el repudio de la ciudadanía por la decisión de la magistrada.

Por otra parte se encuentra dos mujeres embarazadas en prisión en la cárcel regional de Caaguazú, Fani Olmedo y Dolores Paredes embarazadas de 6 y 8 meses están acusadas por “asociación criminal” y solicitaron medidas alternativas a la prisión medida aún no concedida. Uno de los principales acusados por la fiscalía considerado cabecilla del ataque y supuesto responsable de las muertes de los policías, Rubén Villalba lleva 53 días de huelga de hambre en la penitenciaria de tacumbú en la fecha fue llevado de urgencia a un centro asistencial debido a la gravedad de su estado de salud. Néstor Castro se encuentra con 50 días de huelga de hambre y con su salud deteriorado también. Ambos solicitan libertad y dicen que llegaran hasta las últimas consecuencias.

La conspiración y confabulación de Campos Morombi, es un plan ideado perfectamente por los sectores que responden a los agro sojeros, latifundistas, terratenientes, el poder judicial y el poder político sin dejar de mencionar la injerencia de la multinacional Rio Tinto Alcan de quien se dijo patrocinó la parte económica a los parlamentarios para acelerar el juicio político. En la trama de Curuguaty hay más preguntas que repuestas, la justicia ha decidido investigar solamente al sector campesino y ha sido complaciente con otros sectores. Hoy a 9 meses de la masacre de Curuguaty no hay un fallo judicial, mientras los campesinos siguen reclamando justicia y libertad con medidas extremas como son las huelgas de hambres.

Gabriel Fernández B.

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