Qué pasa en Paraguay? Disputas y pugnas de poder: la pérdida de racionalidad.
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Nuestro analista invitado, de Política Nacional e Internacional, Hugo Ruíz Díaz, nos invita a mirar las diversas reacciones que se dieron en estos dos días posteriores a los disturbios del viernes pasad0.
Qué pasa en Paraguay?
Primera Parte
Disputas y pugnas de poder: la pérdida de racionalidad.
Comencemos con algunos hechos relevantes y sorprendentes a la vez.
a. Jorge Lara Castro, ex Canciller del gobierno de Fernando Lugo, califica la aprobación de la enmienda como Golpe de Estado y confiscación de la soberanía popular ( sic!). Como si el Referendum por el que se va a pronunciar el pueblo sea la instauración de la dictadura.
b. Raul Montero Bray aplaude la intervención del imperialismo norteamericano para poner orden en el Paraguay ( sic!),
c. Un estimado Profesor afirma que la dictadura se instauró de nuevo en el Paraguay después de la dictadura de Stroessner,
d. Desde el P- MAS de Camilo Soares y de Rocío Casco hacen llamado para asesinar a Fernando Lugo,
e. Intelectuales orgánicos de la oligarquía, tales Line Bareiro, Lilian Soto; Milda Rivarola y acólitos afirman, en el más alto grado de irracionalidad y vulgaridad, que la reelección es sinónimo de dictadura. En esta trampa caen académicos hasta del mismo Partido Popular Tekojoja.
f. El Partico Comunista Paraguayo con el Partido Popular Paraguay Pyahura, afirman que esta pugna política, que la crisis de Estado, que la disputa del poder entre facciones oligárquicas, que la crisis abierta, no es su problema. Rechazan así la lucha política y se abstienen de poner los pies en el barro. Una posición más que cómoda.
g. En general, la tesis sostenida por los sectores oligárquicos que se disputan el poder en crisis del Estado, de que único responsable de la situación es Fernando Lugo prendió.
h. Algunos sectores progresistas y de izquierda se tragaron la venenosa pero dulce píldora de la oligarquía y de sus partidos políticos. Otros propagan esta tesis directamente como voceros directos de la oligarquía y del imperialismo como es el caso del P- MAS y sectores afines.
De esta manera, los responsables de la situación en el Paraguay, no serían los sectores oligárquicos que detienen aun el poder, pero en crisis.
Para un sector del progresismo, de la izquierda, así como para una parte de la población, el sector de la oligarquía que perpetró el golpe de Estado y la masacre de Curuguaty, los crímenes y asesinatos de dirigentes campesinos, los asesinos de Guahory, son hoy, los defensores de la democracia y de la institucionalidad democrática. Propaganda simple, pero eficaz.
Con estos ejemplos es suficiente.
Claramente, lo fenomenológico, o si se quiere, la propaganda , la lucha hegemónica y la violencia desatada por los sectores de la oligarquía en disputa por el poder del Estado, surten efectos. Crean el desconcierto necesario y anulan u obnubilan la conciencia.
Hacia una ruptura revolucionaria?
Cuando se desatan pasiones, odios, venganzas, cuando el “análisis” se basa en aproximaciones someras y superficiales; cuando se pierde de vista el verdadero problema, cuando se obvia la naturaleza de la crisis político-social- hegemónico y política del poder de la oligarquía, cuando se pierde la racionalidad; es justamente porque la crisis está abierta.
Y si la crisis está abierta; la disputa de poder está al orden del día. Sin disputa de poder no hay crisis. Sin crisis no puede haber disputa de poder.
Si tal confusión existe, es porque existe una crisis social y política que involucra a todo el país. Y si tal crisis existe es que se abren las perspectivas o de consolidación del poder oligárquico- de uno de los sectores- o de una situación potencialmente revolucionaria.
Ese es el verdadero problema. Ese es el centro de la disputa y de las luchas políticas y otras, en el Paraguay. Ocultar esa crisis, crear la confusión, es el objetivo principal de ambos sectores oligárquicos; de tal forma a impedir si fuera posible; una transformación radical, resultado de la lucha política o de otras formas de lucha.
Esto explica el odio de la oligarquía y de sus voceros que hasta llaman a asesinar a Fernando Lugo.
En realidad, es un llamado hecho por todos los sectores de la oligarquía, para aniquilar físicamente a toda la izquierda, a todos los demócratas, impedir todo cambio, cueste lo que cueste. Incluso otro, cometer otro genocidio.
La dictadura está. Y está la disputa asesina abierta entre sectores oligárquicos en crisis, con crisis de legitimidad del Estado. Es ésta la dictadura real.
La pugna por el poder, la lucha abierta no es entre democracia y dictadura.
La lucha real, la lucha de clases agudizada por la oligarquía, es entre barbarie o cambio. Elemental Watson.